Tanto si dispones de fotos o vídeos tuyos de naturaleza sexual en tu ordenador o móvil como si los has enviado a alguien, puede darse el caso de que un ciberdelincuente obtenga acceso a ellos. Este delincuente o "sextorsionista" te hará chantaje para no difundir masivamente el contenido sustraido, pidiendo dinero a cambio.
La sextorsión es una forma de ciberdelito en el que el delincuente, que posee contenido comprometedor sexual sobre tí, te pide algo a cambio, generalmente dinero, para no publicar las fotos en Internet.
No necesariamente, como indicábamos al inicio, debes haber enviado las fotos. Un ciberdelincuente puede instalar un software espía en tu ordenador o smartphone y no sólo acceder a su contenido sino, además, incluso ver lo que puedas estar haciendo con tu webcam y grabarlo. También puede ocurrir que te roben el ordenador o tu móvil y ya te puedes imaginar lo que puede llegar a ocurrir con tu contenido más personal.
Por otro lado, según instituciones especializadas, existe una estrecha relación también entre los casos de sextorsión y los de pedofilia y pornografía infantil en aumento.